‘Los duelistas’ es una de las mejores películas de Ridley Scott y, al mismo tiempo, una de las menos recordadas. Es curioso que esto sea así cuando, junto con ‘Alien’ y ‘Blade Runner’, este trabajo es el mejor del director.
‘Los duelistas’ es una adaptación
de la novela de Joseph Conrad. El guion fue firmado por Gerald Vaughan-Hughes y
es muy fiel al texto original. Los añadidos son menores. Lo que nos cuentan es
la relación entre dos militares, Feraud y D’Hubert, que se baten en duelo a lo
largo de su vida en varias ocasiones. Por distintas razones van sobreviviendo a
cada encuentro; duelos que se desarrollan de forma distinta. A caballo, a
espada, breves, sangrientos. Durante el desarrollo de la trama comprobamos que,
en realidad, lo que nos van contando es cómo conviven y salen adelante dos
formas de vida. Lo duro, belicoso, descortés y primitivo de Feraud se enfrenta
a la clase aristocrática, a la calma, a la cultura exquisita de D’Hubert.
Aunque, a decir verdad, dado que el punto de vista utilizado es el de D’Hubert,
el carácter y la psicología de Feraud quedan algo desdibujadas.
Ridley Scott, influenciado (sin
duda) por la película de Stanley Kubrick, ‘Barry Lyndon’, busca encuadres con
distintas iluminaciones que nos enseñen algo parecido a lo que son los lienzos
de la época romántica. Esa iluminación, lógicamente, naturalista, toma especial
relevancia con el uso de velas y sombras en interiores. Los exteriores repiten
una idea que desde el principio, Scott, quiere hacer llegar: cómo es la
relación entre los protagonistas. El fotógrafo Frank Tidy hace un trabajo
espléndido. Los personajes protagonistas son encarnados por Harvey Keitel
(llegaba de un intento fallido por interpretar el papel principal en ‘Apocalypse
Now’) y Keith Carradine. Ambos están muy bien dirigidos y consiguen una
actuación sobresaliente.
‘Los duelistas’ es una excelente
muestra del cine que se filmaba en esa época (1977) y está a la altura de las
mejores películas de Scott. No dejen de prestar especial atención a cómo el
director va utilizando a los personajes femeninos para que las personalidades
de los duelistas vayan dibujándose con coherencia. Eso y un montaje que va en
busca de lo mismo, son aspectos especialmente interesantes.
Nirek Sabal